Si la mirada dice algo…
Entonces vamos a escucharla
Con la tinta de fuego
Y las manos vehementes que la definen
Y es la cascada la música,
Y la temperatura helada sobre el rojo cuerpo…
Si las rocas sintieran, se moverían regocijadas
Entonces sería una coreografía exótica…
La tenaz y obstinada dama arde entre el mundo de hielos…
El viento ataviado del color más extravagante,
el transparente…
Y la dama receptiva, a la espuma…
Y si las rocas sintieran…
Entonces danzarían en línea…
Pero rodando hasta ser libres…
Y ahí se escucharía el canto de esa mirada…
Sensual y apasionada, palpitando de deseos
Y es entonces cuando expongo…
Si la mirada ciertamente dice algo…
Entonces; vamos a escucharla.
Si la dama danzara… y las rocas sintieran…
… sería cascada el mismo viento
Y nadaría al concluir la danza
Entre un remolino de céfiro en las nubes.
G.F.N.
ANIG HARAF