Amaneció y se avivaron los sueños;
sobre un barquito de madera que flotaba sobre la cama de nubes
y me estiré, necesario me es por las mañanas,
con un sonido emitido cargado de deseos por amar mas al colchón....
oh! cuanto amo a mi colchón
como una brisa sobre mi frente, mi cabello enredado ...
ya navegando en el cielo me levanto y lavo mi rostro
con el agua marina del pacifico...ahi se deleita mi alma,
sobre la arena, con las olas que me golpean el cuerpo,
por fin abro los ojos y difusamente descubro la regadera que se ríe y goza de mi.
G.F.N